So here are five things not to do this Lent:
Don’t give up. Instead of giving up something for Lent, try doing something that will bring you closer to God. Here are some ideas: go to Mass during the week, spend time reflecting on the daily or Sunday readings, experience the beauty of God’s creation by taking walks, make donations to your favorite charities, volunteer at the local food bank, light candles and say prayers for the people you know who are struggling.
Don’t sweat it. Whatever it is you committed to do (or not do) this Lent, the point isn’t to do (or not do) it perfectly. Do it (or don’t do it), but if you don’t do it (or if you do do it), accept it as a reminder that you are not perfect. Only God is perfect. Say a prayer and start again.
Don’t starve yourself. Lent isn’t about going on a diet or losing weight; it’s about the conversion of our hearts. Eat healthy, get some exercise, and don’t succumb to our culture’s obsession with physical appearances.
Don’t make it more difficult than it is. The three pillars of Lent are prayer, fasting, and almsgiving. Find simple ways to pray, fast, and give to the poor.
Don’t hold back. Lent will present you with many opportunities to convert your heart and your life, to heal broken relationships, and to grow closer to God. When you find yourself presented with such an opportunity, embrace it.
On further reflection, this Lent I should give up fighting with my sister Mary :). The poor woman had to put up with me all these years, borrowing her clothes and touching her stuff—things I still do. Actually, we don’t fight much anymore. I guess we are getting older or maybe wiser. Today we are grateful to have each other.
So this Lent don’t give up, don’t sweat it, don’t starve yourself, don’t make it more difficult than it is, and, most especially, don’t hold back! May you be moved this Lent by a deep desire for a new heart and a new spirit, and may God answer your prayer.
Cinco cosas que no se deben hacer en Cuaresma
Siempre me ha gustado el tiempo de Cuaresma. Para mi es el tiempo para volver a enfocarme en Dios y para poner mi vida en orden. De niña yo pensaba que la época de Cuaresma era para hacer sacrificios, como por ejemplo, no comer dulces y dejar de pelear con mi hermana Mary. Pero me he dado cuenta que la Cuaresma no es solo para hacer sacrificio de dejar de hacer cosas, sino mas bien es el tiempo de buscar la oportunidad de ser todo eso que Dios quiere y me ha llamado que yo sea, una persona santa, saludable y amorosa.
Así que aquí tienen cinco cosas que no se deben hacer en Cuaresma:
No deje de hacer cosas por sacrificio. En vez de dejar de hacer cosas como sacrificio en Cuaresma, trate de hacer cosas que lo acerque más a Dios. Aquí tiene algunas ideas: vaya a Misa durante los días de semana, tome tiempo para reflexionar en las lecturas de la semana y del domingo, salga a caminar y experimente la belleza de la creación de Dios. Mejor aun haga alguna donación a su institución de caridad favorita, hágase voluntaria en su banco de alimento local, encienda una vela y haga oraciones por las personas que usted conoce que están pasando por momentos difíciles.
No jure en vano. Cualquiera que sea la cosa que se comprometió a hacer (o no hacer) en esta Cuaresma, el punto no es hacerla (o dejar de hacerla) perfectamente. Hágala (o no la haga) pero si no la hace (o si la hace) acéptala como un recordatorio de que usted no es perfecto. Solo Dios es perfecto. Haga una oración y empiece todo de nuevo.
No se eche a morir con el ayuno. La Cuaresma no se trata de empezar una dieta, o de perder peso; se trata de la conversión de nuestro corazón. Coma de manera saludable, y haga ejercicios pero no sucumba a la cultura de la obsesión por la apariencia física.
No lo haga más difícil de lo que realmente es. Los tres pilares de la Cuaresma son: la oración, el ayuno y dar limosna. Encuentre pues un modo sencillo de orar, de ayunar y de dar a los pobres.
No se retenga. La época de Cuaresma le presentará muchas oportunidades para convertir su corazón y su vida, a sanar relaciones rotas, y a crecer más cerca de Dios. Cuando usted se encuentre con tales oportunidades, no se retenga, acójalas.
Pensándolo bien, en esta Cuaresma si debo dejar de pelearme con mí hermana Mary. La pobre ha tenido que luchar conmigo por tantos años, tomándole su ropa prestada, y tocando sus pertenencias, cosas que aun hago. En realidad ahora ya no peleamos tanto. Creo que estamos envejeciendo, o quizás ahora tenemos más sabiduría. Hoy por hoy estamos muy agradecidas la una de la otra.
Así que en esta Cuaresma ¡no ofrezca dejar de hacer cosas, no jure en vano, no se eche a morir, no lo haga mas difícil de lo que es, y muy especialmente, no se retenga! Que en esta Cuaresma usted sea movido por un deseo profundo de cambiar su corazón y su espíritu por uno nuevo, y que Dios escuche su oración.
Bendiciones de Cuaresma
Sr. Terry is the Executive Director of RENEW International and a Dominican Sister from Blauvelt, NY.